El dolor de hombro es muy común y molesto. En el artículo de hoy, te voy a hablar de lo que le puede estar pasando para que este padecimiento se genere y, además, conocerás cómo detectar el punto central de la dolencia y su tratamiento más adecuado.
¿Cómo aliviar el dolor de hombro?
Es muy común tener dolor de hombros cuando trabajamos sentados o cargando peso. Lo que más castiga a esta zona suelen ser las malas posturas que vamos adquiriendo. Normalmente tendemos a ir con los hombros echados hacia delante lo que va provocando un desgaste progresivo que a la larga nos va a generar dolor.
El hombro puede dañarse a nivel de hueso por un desgaste o por una calcificación de éste. Esto último, provocará un desgarro en los tendones que terminará por producir molestias.
Otras afecciones que afecta a esta parte del cuerpo son: la inflamación de los tendones o un exceso de contracturas.
¿Cómo saber cuál es el origen del dolor de hombro?
Para poder saber cuál es el origen de tu problema lo que debemos hacer es palpar el hombro para detectar las zonas que están más adheridas, dañadas o endurecidas.
Si el problema es de tendones, al ir palpando la articulación notaremos pequeñas bolitas muy próximas a la inserción del músculo.
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Si el problema es de hueso (como norma general) el masaje no te va a aliviar nada. Si después de dos o tres masajes, no notas ningún alivio, lo mejor es que vayas al médico para que te puedan hacer unas pruebas y valorar cómo está la articulación.
En muchas ocasiones, la molestia se genera por un exceso de retención de líquido en la zona, ya que sobrecarga la musculatura, el sistema linfático no funciona adecuadamente y el hombro empieza a dañarse. Eso lo detectaremos porque al tocar la axila sentiremos que los ganglios de esa zona están muy inflamados. Pero, no te preocupes, si esta es la causa de tu molestia la vas a poder detectar y trata rápidamente con las yemas de tus dedos.
¿Cómo se hace el masaje de hombro?
Ahora que ya aprendimos a detectar este padecimiento aprenderemos cómo se hace el masaje en el hombro para liberar el dolor.
Trabajo en la parte posterior
Con la persona (paciente) tumbada boca abajo haremos un pequeño calentamiento de la zona, amasando el trapecio, el deltoides, la zona del hombro y la parte de la escápula.
En la escapula trabajaremos tres puntos. El primero está en el pico inferior justo subiendo un centímetro desde el borde. Aquí utilizaremos el pulgar para hacer masajes circulares. Al trabajarla veras que es una zona sensible y que molesta un poco más que el resto, pero no pasa nada, ajusta la presión a lo que la persona soporta para que note poquito a poco el alivio y vaya sintiendo como se libera.
El segundo punto está en el centro exacto de la escápula. Si colocamos la mano por la parte superior y por la inferior, podremos localizarlo perfectamente. Esta área es una unión de varios músculos, por lo cual, también tendrá una sensibilidad especial. Debido a esto, deberemos ajustarnos poco a poco a lo que la persona tolere.
El tercer punto va a ser justo la zona que separa el brazo del omóplato. Es decir, en la articulación del hombro por la parte posterior (justo en el medio) donde hallaremos varios músculos. Probablemente ahí el paciente tenga mucha tensión, así que insistiremos con el pulgar para trabajar el punto de dolor y con el puño iremos haciendo unos rodados.
Si notas que esa zona está muy sobrecargada, procederemos a hacer una pinza mantenida, cogiendo toda esa musculatura endurecida. La mantendrás así, hasta que observes que el musculo se afloja.
Masaje en la línea del cuello al hombro
Una vez finalizado el trabajo en la escapula pasaremos a la línea que va desde el cuello hasta el hombro, por la parte superior del trapecio. Está la masajearemos con varias maniobras. Iniciaremos con un amasamiento de calentamiento y después usaremos el puño para hacer un movimiento y un estiramiento más profundo.
Podemos emplear los nudillos para hacer un amasamiento en movimiento o podemos hacer un planchado con el puño recto desde la zona del cuello hasta llegar al omoplato, repitiendo varias veces hasta que notemos que los hombros bajan un poquito.
Recuerda que la postura es muy importante a la hora de realizar estos masajes. Es mejor que uses el peso del cuerpo en vez de la fuerza. Si quieres saber cómo colocarte al realizar un masaje te recomiendo ver los demás artículos del blog. Es muy común que los masajistas primerizos se lesionen al trabajar porque no se colocan adecuadamente, así que ten mucho cuidado.
Estiramiento de la escápula
Para realizar el estiramiento, vamos a colocar el brazo por detrás de la espalda a una altura donde no moleste.
Después bajaremos el codo para pegarlo a la camilla y así conseguiremos que la escápula se eleve un poquito.
Dependiendo de la flexibilidad de cada persona, vas a poder colocar el brazo en la zona lumbar o incluso lo vas a poder subir hasta la zona dorsal. Recuerda, no fuerces, hazlo de una manera cómoda donde se pueda notar el estiramiento, pero sin dolor.
Al hacer esto, podremos también podremos acceder a la zona que está debajo del omóplato. Ahí colocaremos las yemas de los dedos y echaremos nuestro peso hacia atrás para estirar toda esa musculatura. Aunque parezca que esta postura duele, molesta o es desagradable, no es así. De hecho, es bastante cómoda si la realizas adecuadamente.
Te debes mantener en esa postura el tiempo suficiente hasta que notes que los dedos se introducen o que la escápula sobre sale un poco más. No tengas prisa y no corras. Ten un poquito de paciencia y verás que el resultado es mucho mejor.
Parte anterior del hombro
Ahora vamos a trabajar el hombro desde la parte anterior. Para ello cambiaremos la postura y pondremos a la persona boca arriba.
Lo primero que haremos será tratar el pectoral, un músculo que engancha desde el hombro hacia el esternón o la clavícula. Lo podremos coger perfectamente pinzando por la parte delantera. Esto lo haremos con las dos manos hasta notar que lo hemos separado lo más posible. Recuerda tener cuidado porque está maniobra es un poquito dolorosa.
Cuanto más se echen los hombros hacia delante más acortado va a estar este músculo y, por ende, generará más dolor. Además, conforme vas haciendo estos masajes, notarás una evolución en este acortamiento, lo que provocará que cada vez moleste menos.
Trabajo en la zona de la axila
La siguiente maniobra va a ser en la axila. Como he dicho en otros artículos de cómo eliminar la retención de líquido, muchas veces es un problema que genera el dolor del hombro. Para evitarla, drenaremos los ganglios de esa zona.
Para eso vamos a separar el codo un poquito del cuerpo y accederemos con tres yemitas de los dedos al punto central de la axila. Al hacer esto, ten cuidado que es una zona de cosquillas y a la gente a veces le molesta. Como recomendación ve directo, sin miedo y no titubees, porque cuantas más caricias hagas, más desagradable va a ser.
Con la mano bien acoplada en el centro realizaremos un bombero de estos ganglios. Aquí vamos a poder observar la dureza o tensión que tienen. El bombeo va a ser lento y progresivo. Durante 4 segundos vamos a ejercer una presión progresiva y en el mismo tiempo la soltaremos. Es muy importante que lo hagas de manera continua y rítmica para que sea mucho más eficaz y consigamos movilizar la linfa y el exceso de líquido que pueda tener.
A medida que se repita esta maniobra (durante al menos quince o veinte veces) notarás como esa dureza va desapareciendo, mientras que el paciente sentirá como poco a poco se libera la tensión del hombro.
3 puntos de medicina china para mejorar los resultados del masaje
Después de estas maniobras ya deberías empezar a notar un alivio en el brazo, pero te voy a dar además tres puntos muy buenos de medicina tradicional china para que completes la técnica.
Los podemos trabajar de muchas maneras, ya sea con digitopresión, acupuntura o moxa. En este artículo, le enseñaré a hacerlo de forma manual.
14IG “Bi Nao”
El primer punto es el 14 de intestino grueso, el cual, lo encontramos en el deltoides justo bajando desde el centro de la articulación (en un huequito). Este es un “punto maestro del hombro”, en medicina china se utiliza muchísimo y ayuda a liberar todo el dolor y tensión que puede estar provocando molestias.
Para trabajarlo usaremos el pulgar, vamos a masajear en círculos hasta notar un alivio o un cambio en la textura del tejido. Recuerda, no tengas prisa y ajustate a la sensibilidad de la persona que recibe el masaje. Ya sabes que cuanto más crónico sea el problema, más tiempo vas a necesitar.
8TR “San Yang Luo”
El segundo punto del que voy a hablar es el 8 de triple recalentador, el cual, está localizado a 4 dedos desde el pliegue del codo, justo en la zona central (en un huequito) de los músculos. Se llama San Yang Luo y es el cruce de los tres canales Yang que pasan por el brazo.
Aquí también va a haber sensibilidad, por lo cual, haremos el masaje igual que en el punto anterior. Localizaremos y utilizaremos el pulgar para hacer círculos. Mantendremos la maniobra hasta que notemos un cambio. Esta técnica es buenísima para quitar todas las tensiones de los brazos ya sea de hombro, de codo o de muñeca. Lo puedes utilizar en cualquiera de esos problemas.
11IG “Qu Chi”
El tercer punto del que vamos a hablar es el 11 de intestino grueso. También se conoce como “Qu Chi” que significa estanque sinuoso. Para localizarlo doblaremos el codo; donde acaba la arruga ahí lo detectaremos. Es ideal para tonificar el canal de intestino grueso que justo pasa por el centro del hombro.
Es un punto tierra y ayuda a distribuir equilibradamente su energía. Para trabajarlo usaremos el pulgar como en los dos puntos anteriores y haremos lo mismo, tratar de llegar a esa presión donde se nota una molestia, pero no duele. Masajearemos hasta que haya un cambio tanto en el dolor como una textura.
Lo bueno de los tres puntos que hemos mencionado es que los puedes trabajar en tu propio cuerpo. Además, te ayudarán a equilibrar la energía del hombro poco a poco y a ir rebajando ese dolor.
Lo puedes realizar a cualquier hora del día, mi consejo es que la hagas cuando más suele molestar. Por ejemplo, hay veces que el hombro duele cuando nos levantamos por la mañana y hasta que no empezamos a movernos, no deja de doler. Para este caso, yo recomendaría hacerlo inmediatamente después de despertar. En caso contrario si la molestia surge en la noche, ese momento será el mejor para masajearlo
Si te duele mucho el hombro, también puedes tratar los puntos de medicina china a lo largo del día, las veces que sean necesarias.
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Como ya hemos hablado en otros artículos a veces los dolores no son causados exclusivamente por un problema físico, sino que tienen un componente emocional. Nuestro cuerpo habla con nosotras y se comunica a través de dolores y molestias, por lo cual, si nos está doliendo mucho el hombro y de manera continua puede que nuestro organismo nos esté queriendo decir algo.
Los hombros emocionalmente se refieren muchas veces a la carga de responsabilidades, nos ponemos más peso del que podemos soportar, estamos asumiendo algo que no nos corresponde o le estamos dando vueltas a una idea que no tiene solución. Si esto que te estoy contando te suena o te ves un poquito reflejado en ello, es necesario que aparte de masajearlo trates su origen emocional. Mi consejo, es que dejes de darle vueltas al problema y te quites o examines todas las responsabilidades o el exceso de carga que estás teniendo y no te corresponde. Al liberar las presiones extras que tienes, te sentirás más aliviado.
Hasta aquí el artículo de hoy. Te invito a probar el masaje y si puedes, por favor comentame como te ha ido con él. También puedes hacerme preguntas en los comentarios si te has quedado con dudas.
Recuerda siempre cuidarte porque tu cuerpo es tu templo. ¡Nos vemos en el próximo artículo!