La técnica natural de las ventosas o Cupping es famosa desde los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro. Es una técnica milenaria usada en muchos rincones del mundo y, como muestra este fragmento de un grabado medieval, usada desde hace siglos.

Es un funcionamiento simple de ahí su gran eficacia. Las ventosas producen vacío en su interior mediante la extracción de aire, para lograr la succión.

Las ventosas modernas suelen aplicarse por una bomba de aspiración o pera de goma, suelen ser de plástico o cristal. Tradicionalmente se han utilizado cuernos de animales, bambú y otros materiales como tazas, se utilizaba la combustión de un algodón empapado en alcohol dentro de la ventosa creando un vacío que al colocarla sobre la piel hace que se adhiera. Esta forma, además del efecto de succión, es también efectiva ya que el calor ayuda a la abertura de los poros de la piel.

¿Para qué usamos las ventosas?

Las ventosas hoy en día tienen dos funciones principales como terapia natural:

– Elimina el dolor físico muscular ya que se puede focalizar en puntos concretos. Esta técnica es conocida por las marcas que dejan las ventosas, rojeces o moretones circulares, la ventosa se deja fijas durante un periodo de tiempo corto para descontracturar de forma rápida.

– Técnica anticelulítica y/o drenante. Las ventosas se trabajan en movimiento una vez succionada la piel, en esta técnica es esencial aplicar aceite en la zona tratada para que pueda correr bien la ventosa, además esta modalidad no deja marca.

Tradicionalmente las ventosas no solo han servido con estos fines, también son una de las mejores técnicas para reequilibrar la energía interna usando los puntos de acupuntura de la Medicina Tradicional China.

Beneficios

La aplicación de ventosas aporta numerosos beneficios para la salud y el cuerpo:

• Es un relajante muscular, si el músculo está contraído por un esfuerzo, la ventosa hace que se relaje a causa del estiramiento que provoca la succión.
• Tiene un efecto analgésico ya que produce la relajación muscular.
• Activa la circulación de sangre gracias a la hiperemia (rojez que se produce por mayor circulación de sangre en la zona) producida por las ventosas.
• Eliminar el exceso de grasa y la retención de líquidos ya que moviliza la zona.
• Reduce edemas, ayuda a sacar la sangre estancada y drena la zona.
• Aumenta las defensas, el hecho de generar hiperemia atraer sangre oxigenada al musculo, esta sangre limpia produce recambio de células inmunes con lo cual la recuperación se incrementa.

Las ventosas pueden ser usadas por todo tipo de personas tanto hombres como mujeres, gente deportista o no. La única contraindicación importante es no realizar el tratamiento con ventosas si tienes fiebre o se ha tenido en días anteriores y si estás embarazada.

Para deportistas con musculatura muy desarrollada o personas fuertes y de grandes dimensiones es un complemento ideal al masaje deportivo ya que ayuda a descargar y ayuda al terapeuta a tratar de forma más profunda el músculo. Focaliza la fuerza en un solo punto para tratar esa contractura recurrente de una vez por todas.

Si por el contrario quieres combatir la celulitis también es un complemento ideal al masaje anticelulítico ya que rompe los cúmulos grasos y ayuda a la circulación de la zona trabajada.

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Está técnica puedes añadirla a tu masaje en el Templo del Masaje, aportará beneficios tanto físicos como psíquicos. Además de aliviar dolores es una de las mejores técnicas para equilibrar y aumentar nuestra energía vital, quitando bloqueos o estancamientos que favorecen la aparición de enfermedades.