Hola a todos y bienvenidos a un nuevo artículo. En esta ocasión, volveremos a hablar de la reflexología aplicada al tratamiento del dolor cervical (columna vertebral).
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Como ya saben, a través de los pies podemos trabajar todo el organismo. En el blog, hemos visto cómo tratar diferentes zonas con esta técnica, pero nunca habíamos tocado el tema de la columna vertebral y la espalda, que es de lo que te enseñaré a continuación.
Reflexología podal contra el dolor de espalda
La columna vertebral la localizaremos en toda la parte ósea del pie que va desde el dedo gordo (por la parte interna del puente) hasta llegar a la parte trasera del talón.
Esta área se divide en varias partes:
- Las cervicales se encontrarán desde la primera articulación del dedo gordo a la segunda que une el dedo con el metatarso.
- Posteriormente, tendremos las dorsales que recorren todo el metatarso y una pequeña parte del tarso.
- A continuación, hallaremos las lumbares (zona curva), las cuales, abarcan los huesos que tenemos en el tarso y terminan en el principio del calcáneo (hueso del talón).
- Al final, en el calcáneo tendremos el sacro. El último punto de este hueso será el coxis.
Una vez localizadas las zonas procederemos a trabajarlas.
¿Cómo realizar una reflexología podal para aliviar el dolor cervical?
Podemos realizar 2 maniobras: La primera consistirá en trabajar con “caminitos” (presiones con el pulgar) por todo el hueso. Esto aliviará directamente las vértebras, disminuyendo las molestias generadas por una hernia, protuberancia, tensión o giro.
La segunda maniobra consistirá en utilizar la técnica del “caminito” en la zona muscular que está ubicada un centímetro por debajo de la zona del hueso.
Evidentemente, si la persona tiene un problema físico no se logrará una recuperación completa a través de los pies, pero si ayudaremos energéticamente y facilitaremos que la persona poco a poco vaya encontrándose mejor.
Realizaremos el movimiento desde abajo hacia arriba y repetiremos todas las veces que queramos (al menos 3, aunque se puede insistir más tiempo).
Trabajaremos ambas áreas, tanto la parte muscular como los huesos.
Si hay zonas que notamos más duras, crujen o son más sensibles, hay que quedarnos más tiempo haciendo la técnica del “caminito” hasta que cambie la textura.
Una molestia en una parte especifica, nos puede indicar que esa zona en la espalda está más dañada que el resto.
¿Cómo lograr un mayor alivio?
Este masaje sería suficiente para liberar un poquito la tensión de la columna, pero si queremos insistir más en la espalda o aliviar una molestia en la zona del puente del pie, podemos aplicar otra técnica, un poco más intensa.
Esta técnica consistirá en realizar un masaje en forma de “X” en la parte muscular, avanzando de manera transversal.
Mediremos un centímetro desde la parte del hueso de la columna hacia la musculatura y realizaremos la técnica desde abajo hacia el dedo gordo, insistiendo más en las áreas endurecidas.
Esta maniobra la repetiremos varias veces hasta que notemos un cambio o a la persona le moleste menos.
Esta técnica es muy completa y consigue liberar muy bien todas las contracturas y durezas.
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Aunque con esto ya hemos logrado un trabajo profundo y muy bueno, podemos hacer un complemento con fricciones en toda la zona lateral que se ubica entre el dedo pulgar y el índice para finalizar y dejar una sensación más agradable.
Alternaremos cada mano en sentido contrario para hacer un desbloqueo de toda la zona de la columna. Al igual que en las técnicas anteriores, iremos desde abajo hacia arriba.
Con esto tendremos un trabajo completo de la columna vertebral. Estas maniobras las puedes incluir en cualquier reflexología que hagas.
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Hasta aquí el artículo de hoy, esperemos que te haya gustado y que te sea de mucha ayuda para mejorar tu técnica de masaje.
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Y en qué pie: Derecho o izquierdo?
En los dos.