¡Bienvenidos a un nuevo artículo! El día de hoy hablaremos de uno de los temas que más les gusta a nuestros lectores: La reflexología.
A continuación, les enseñaré un nuevo tratamiento que les ayudará aliviar el problema de los juanetes en los pies.
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¿Qué es el juanete?
El juanete es un padecimiento generado por una deformación del dedo gordo. Suele presentarse más en las mujeres, aunque también afecta a los hombres.
La deformación de esta articulación del dedo gordo del pie, normalmente se produce por utilizar zapatos de tacón o no usar un calzado adecuado.
El origen del problema no está claro, sin embargo, se manifiesta en una deformación del hueso que puede llegar a torcer el dedo.
El nivel de dolor dependerá del grado de avance del juanete. Por esta razón, puede generar molestias incluso con solo calzarnos los zapatos.
Si no se trata oportunamente, acabará provocando dolores a diario y la única forma de corregirlo será a través de la operación. El proceso quirúrgico suele ser bastante agresivo, ya que consiste en limar los huesos y volverlos a colocar. En algunos casos, incluso se llegan a utilizar placas y tornillos para poderlos fijar.
Por esta razón, es recomendable que no descuidemos nuestros pies. Si notamos que el juanete comienza a asomarse, hay que poner en práctica los siguientes trucos para evitar que se extienda y empeore.
Masaje de reflexología para aliviar los juanetes
Calentamiento
La zona refleja en la que comenzaremos a trabajar corresponde a la parte alta de la espalda (las primeras dorsales). Por lo general, las personas que tienen juanetes suelen presentar afecciones en esta área.
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Antes de iniciar, realizaremos un calentamiento del pie para reflexología. No es bueno hacer la terapia sin haber hecho este paso previamente.
Masaje en la articulación del dedo gordo
Empezaremos nuestro masaje movilizando un poquito la articulación. Para ello, sujetaremos el tarso del pie con una mano, mientras que con la otra cogeremos la cabeza del primer metatarso.
En esta posición, realizaremos una maniobra circular en ambos sentidos. Esta técnica nos ayudará a calentar aún más la articulación para que la podamos trabajar de mejor manera.
También nos ayudará a descubrir la rigidez del paciente. Entre más rigidez tenga, el movimiento deberá ser más suave para evitar el dolor.
Masaje en el metatarso de los dedos
Terminado lo anterior, procederemos a sujetar con una mano el metatarso y con la otra la segunda falange del dedo gordo.
En esta posición, realizaremos una movilización del dedo en ambos sentidos para lograr mejores resultados.
Masaje de la planta del pie
Después de trabajar la flexibilidad de la articulación, masajearemos la zona a través de la planta y el dorso del pie. Para ello, utilizaremos la técnica del “caminito” empleando el dedo pulgar, yendo desde el lateral de la articulación (bordeando por la planta) hasta la parte interna de la planta del pie.
El masaje se dividirá en 3 niveles: centro, inferior y superior de la articulación.
El movimiento consistirá en realizar el “caminito” mientras movilizamos el dedo de manera circular (al mismo tiempo).
Recuerda que, si el paciente tiene mucha rigidez, el movimiento deberá realizarse de forma más lenta y cuidadosa. Si sigues este consejo, conforme vayas trabajándolo aumentarás su movilidad.
Masaje en el dorso del pie
Finalizado lo anterior, realizaremos las mismas maniobras, pero por la parte del dorso del pie. De igual forma, trabajaremos en 3 niveles distintos: por la parte central, inferior y superior.
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Para masajear toda la zona del dorso es más cómodo utilizar dos dedos (índice y medio). ¡Tenlo en cuenta!
El masaje consistirá en ir haciendo el “caminito” mientras movilizamos el dedo. Si notamos que hay mucha rigidez, es mejor que realicemos la maniobra sin la movilización. Este ejercicio lo haremos hasta que la sensación del tejido cambie.
Como es una parte más dura y no tiene mucha musculatura es normal que notemos más el hueso, pero si la zona está afectada crujirá un poco. Por ende, es recomendable repetir la maniobra hasta que desaparezca el sonido o, por lo menos, durante un minuto.
Recomendaciones al tratar los juanetes con reflexología
Si realizamos este masaje todos los días y en ambos pies, notaremos enseguida la mejoría, sobre todo, en aspectos como el dolor y la flexibilidad del dedo.
Si quieres mejorar tus resultados, te recomiendo colocar algo en el hueco que existe entre el dedo gordo y el segundo dedo del pie. De este modo, se conseguirá una mayor separación de la musculatura lo que provocará que la terapia tenga un mejor resultado.
Tratamiento del juanete desde el punto de vista emocional
Además de trabajar manualmente la parte de la articulación que está afectada, también deberíamos tratar la parte emocional que influye en la aparición de este problema.
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El juanete surge cuando la persona está dando de más o siempre está al pendiente de otras personas. Suele presentarse en aquellos a los que les gusta que todos estén bien atendidos y que no sufran, hasta el punto en que dejan de hacer cosas para ellos mismos por hacerlas para los demás.
Hasta aquí el artículo de hoy, si quieres conocer más secretos de la reflexología no olvides seguirme en todas mis redes sociales y recuerda siempre cuidarte que tu cuerpo es tu templo. ¡Hasta la próxima!